09-02-2011















En mayo de 2010 impartí un taller de gráfica secuencial e ilustracion, todo esto en el Colegio Montessori Epullay. El trabajo fue interesante, pero el poco tiempo que me dieron (2 horas), no fue suficiente para alcanzar mis expectativas en el trabajo experimental.

Ademas no faltan los alumnos que no quieren trabajar, lo que trabajan pero se pierden a la mitad de la clase o los que simplementen hacen lo que quieren.

lo positivo estuvo en la calidad de las instalaciones del colegio (obvio, es uno de los mas caros de chile), y en la disposicion de materiales y fotocopias.

lo negativo... que los muchachos pertenecen a estratos socioeconomicos muy altos, que realmente no tienen mucho interes por aprender cosas nuevas, dandose por enterados de todo. Muchos sabian muchas cosas, pero otros caian en lo superfluo que muchas veces tienen las clases con posibilidades de todo.

ojala pudiera hacer este mismo taller, pero en un colegio de la periferia, con una prestancia distinta por parte de los alumnos, en especial gente de estratos medios y bajos que muchas veces si quieren aprender mas.

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